Durante los últimos días, se nos encoge el corazón viendo a toda esa gente, personas que huyen de la atrocidad de la guerra de Siria, tratando de llegar a Europa.
Una guerra, que dura años y que ha provocado que el país este partido en cuatro partes.
Son familias, que huyen de un país sin futuro, personas que huyen porque saben que por su religión serán aniquilados.
Son gente que por la desesperación de llegar a Europa se dejan engañar por mafias que les prometen llegar a Europa en condiciones infrahumanas.
La comunidad internacional no debe permitir que ocurran estas catrástofes e intervenir desde el principio.
Y ahora estar a la altura de las circunstancias y ayudarlos ofreciendo asilo.
Pero sin perder de vista que hay que solucionar el problema en su origen, en Siria.
@jjsesma
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